lunes, 29 de septiembre de 2014

La Democracia, los Partidos y los Líderes


La gran divisoria histórica, política y humana sobre los asuntos públicos --- y del pueblo como sociedad --- se expresa en dos tipos de regímenes políticos:  el sistema totalitario, con sus variantes de autoritarismo y dictadura personal, por un lado, y el sistema democrático liberal, creación --- como la ciencia experimental --- del mundo moderno, del Renacimiento y la Ilustración hasta nuestros días.

El totalitarismo y los dictadores tiránicos son directos, eficientes, y superorganizados.  “El Estado soy yo”, “lo manda el jefe”, y otra expresiones sintéticas, directas y finales, caracterizan el orden antidemocrático en todas sus variantes.

La democracia, por otro lado, sobre la base de las libertades personales y el derecho de asociación, se expresa como reguero, como proliferación de intereses y de grupos, en lo que los Padres de la Constitución de los Estados Unidos llamaron “facciones”.

Por todo lo anterior, en la democracia, el reclamo del poder como medio de diz que representar al pueblo, se organiza en partidos, esto es, partes en busca de la autoridad para representar al Todo, a la comunidad política entera.  El proceso que hace posible eso se llama lucha y competencia partidista.  Ese es el proceso.  El resultado no es ni elegante ni agradable.  “Democracy is not nice” dijo John F. Kennedy.

Lo que ocurrió el pasado fin de semana en un hotel de San Juan, en el que el PNP celebró una asamblea reglamentaria, no es nada fuera del proceso normal de cualquier partido en el cual privan ambiciones encontradas y pasiones antitéticas en camino de realizar tales ambiciones.  Ha ocurrido en nuestra vida pública desde 1887.

El ciudadano y el elector tiene que tragar gordo para allanarse a esa realidad de la lucha partidista, a menos que prefiera la tiranía de una persona, de una “junta” militar, o de una autoridad teocrática, llámese Islam, Cristianismo o Judaísmo.

El PPD está hoy gozoso por el desconcierto del PNP.  Deje el lector que llegue el momento de las decisiones definitivas en el PPD.  Se comportará como… qué?  Como se comporta un partido complejo, a la defensiva, con un Babel de voces reclamando su representación verdadera.

“So, what is new?  Nada.  La política, pero sin política y partidos no hay democracia ni libertades.  Afine el lector entonces su ingenio, asegúrese quién es el menos malo, y vote.  Porque los buenos, los verdaderamente buenos, no corren.

Lo único que puede paliar, aliviar esa realidad amarga --- a la luz de los ideales --- es el liderato que piensa, articula, y educa, en el silencio de las pasiones reeleccionarias.  Si es un liderato que va al frente del pueblo, abriendo caminos, no detrás, averiguando para donde es que va el pueblo para seguirlo.

miércoles, 24 de septiembre de 2014

El Gobierno, Los Partidos y El Pueblo


No debe resultar difícil para el ciudadano promedio --- llamémosle pueblo -- concebir al gobierno como la maquinaria administrativa --- legislativa, ejecutiva y judicial --- encargada de administrar los programas de gobierno, la política pública supuestamente al servicio del Bien Común.

El material de trabajo para esa función administrativa lo provee el pueblo mismo, mediante los programas de los partidos políticos, encargados estos de organizar la opinión pública en torno a valores, intereses y necesidades.

Lo anterior representa una definición sencilla del sistema y proceso democrático.  Tal supuesto funciona prácticamente bien en épocas de consenso social, de homogeneidad valorativa, o de liderato dedicado al servicio y no a servirse.  Así ocurrió en Puerto Rico de 1940 al 1968, porque líderes y pueblo estaban leyendo el mismo texto y la misma página.  Lo he expresado en otro contexto con una formula sencilla: se trata de un liderato que consideró que la felicidad pública constituía el principio de su felicidad privada, y no al revés como se estila en nuestros días.

Lejos de esa feliz fórmula, como antípodas unas de otras, vivimos en Puerto Rico en 2014 una especie de macabra geometría política en que los intereses de la oligarquía gobernante y sus clientes de todo tipo viven y circulan en forma paralela a los intereses y necesidades del pueblo, pero paralelas al fin esas dos realidades no se encuentran.

La vida de los jefes, los contratos, las alianzas, los accesos al poder y las concesiones especiales --- los amigos, los parientes, los compañeros de “sociedad”, los excompañeros de estudios, los contribuyentes políticos, se tragan y sacrifican la otra vida, la deprivada de todo lo anterior --- paralelas ambas, en el tiempo, en el espacio, en el partido, --- pero no se encuentran.

Gobierno y pueblo se intersectan cada cuatro años, en las campañas políticas.  Después, desde 1968 al presente, apenas se interpelan, se conocen, o dan cuenta una a la otra de sus andanzas.

Para la vida oficial --- del poder, del mando, del “prestigio” honorable por el puesto que se ocupa, --- el pueblo, sus necesidades, sus circunstancias, su empleo, su salud, su educación, su seguridad es un primo pobre, un estorbo al disfrute del poder o la apariencia del poder.

Necesitamos urgentemente una nueva geometría política en la que las vidas paralelas de gobierno y pueblo de intersectan en el servicio, de la misma manera que se intersectan en el voto.

lunes, 22 de septiembre de 2014

Prioridades: Entre el Buen Gobierno y la Política de Reelección


La democracia, antes de expresarse numéricamente el día de las elecciones, supone y exige la competencia político-partidista.  De esa manera, aunque el Bien Común exige unidad de propósito y acciones, el Bien Particular --- los partidos políticos --- dividen, compiten y desgarran la unidad necesaria para que lo que se haga desde el gobierno sea común y no particular, del TODO y no de la PARTE, partidos.

Lo que hay que tener meridianamente claro es que lo que es bueno para los partidos --- ganar elecciones para escalar el poder a nombre de todos --- no es necesariamente bueno para el pueblo que sostiene la democracia y los partidos.

Nada ilustra mejor el choque de principios y valores que se da entre el buen gobierno y el interés partidista --- entre la política democrática y los partidos --- que la decisión del gobernante sobre qué va primero, el buen gobierno o la reelección de un líder o gobernante particular. 

El Gobernador Alejandro García Padilla se ha enfrentado en días recientes a ese dilema de principios y valores: el candidato, el partido, o el pueblo como receptor del buen o mal gobierno.

El Gobernador ha optado claramente por sí mismo --- su reelección, y la de su partido --- por sobre los intereses del pueblo y su derecho a un gobierno racional, eficiente, serio.  No ha entendido que la mejor política es la política de la verdad, de la justicia, de la pulcritud administrativa, frente a su antípoda moral, la politiquería con los dineros y la autoridad del pueblo.

Para mi eso es lo que significa la expulsión de Fortaleza de Ingrid Vila.  El cálculo es transparente:  con ella decidiendo los asuntos de gobierno con seriedad, firmeza y racionalidad, no gano en 2016.  Sin ella, con un político partidista en su posición es posible que vigorice al PPD y compre la voluntad del pueblo decepcionado, y puedo reelegirme. 

Es una apuesta: buen gobierno o gobierno partidista. ¡Buena suerte!

domingo, 21 de septiembre de 2014

Los Tres Procesos Sociales que Hoy Definen a Puerto Rico


En un análisis macro sobre el Puerto Rico que hoy vivimos y sufrimos quizás podría decirse que no ha cambiado mucho durante el último medio siglo.  Más o menos la misma población, numéricamente hablando, la misma geografía, la misma organización gubernamental y municipal y la misma estructura económica, aún con los cambios del último cuarto de siglo.

Sobre el trasfondo de esa realidad macro, sin embargo, ocurren tres procesos que definen el sentido de angustia y desesperanza del pueblo avisado y atento a las condiciones que enmarcan su vida, en todos los sentidos.

En primer lugar, salta a la vista la horrenda ola criminal de todo tipo, contra hombres, pero especialmente contra mujeres y niños.  La negación estadística del gobierno trata, pero no puede negar la realidad estadística de la matanza cotidiana --- hombres contra mujeres, hombres contra hombres, y hombres y mujeres contra niños.  No hablo del maltrato moral y sicológico, difícil de definir y procesar, sino del maltrato y la violencia física contra la vida de los más próximos, los vecinos, los conocidos, los niños y las mujeres.  Tiene carácter de epidemia.

¿Causas? La crisis económica del País, la crisis de objetivos, el oscurantismo fundamentalista, que es una especie de espiritismo con corbata y el fracaso de la praxis educativa, a falta de cultura y compromiso.

Existe, sin embargo, en segundo lugar y como respuesta al reguero político frente a la violencia sin freno, una respuesta positiva y generosa de muchas personas y grupos, que pueden denominarse --- a pesar de su diversidad y grado de organización --- Voluntarismo.  Docenas, cientos, quizás miles de ciudadanos privados --- mujeres y hombres todad las edades --- que se han echado sobre sus hombros la tarea de educar, motivar, organizar grupos y comunidades hoy al garete, en torno a valores y principios prácticos de convivencia sana y productiva, para sí mismos, para sus comunidades y el País.  Y lo hacen con gran sacrificio personal y profesional, con sólo el poderoso instrumento de la buena voluntad.  De esa manera, contra la mala voluntad de los sicópatas, de los hombres de embuste, de los cobardes que sólo exhiben su supuesta valentía contra las mujeres y los niños, estos voluntarios apuestan su buena voluntad a una mejor vida, personal y comunitaria.

Queda por analizar el proceso gubernamental frente a la crisis, y preguntarse, en esa pugna de la mala voluntad contra la buena voluntad del voluntarismo, ¿qué hace el gobierno?  No se sabe.  Anda perdido en el bosque de la reelección.  Parece irrelevante.  Quizás no lo es, pero no hay manera de saberlo, porque ni informa, ni explica, ni educa.  Le interesa más su propio ombligo burocrático que la gente… la gente…  ¿Recuerdan?

viernes, 19 de septiembre de 2014

El Despido de Ingrid Vila como Secretaria de la Gobernación


Mi título de hoy habla por sí sólo.  Ingrid Vila no renunció, fue forzada a hacerlo protocolariamente porque la verdadera razón de su salida es inconfesable para el Gobernador, y ella, elegante como es, le permitió la mentira de que le aceptó la renuncia que, supuestamente voluntariamente ella iniciara.

La significación de esa renuncia es enorme en su simbolismo político, y costosa para una administración pública digna y racional.  Todo el País debiera saber, como todos los medios de comunicación ya saben, que el Gobernador actuó, al prescindir de los servicios de la señora Vila, a instancias del gobernador de facto, su hermano mayor Antonio García  Padilla, de tan funesta recordación en la Universidad.

¿Por qué? Porque estorbaba con su rectitud a los procuradores de contratos y prebendas auspiciados por el hermano, por quien nadie votó en Puerto Rico.

¿A quién más estorbaba la rectitud de la señora Vila?  A los políticos del PPD, a los alcaldes chanchulleros que negocian su protagonismo local a cambio de prebendas y concesiones que sólo Fortaleza puede conceder, pero que eran ajenos al concepto de servicio público de la señora Vila.

Todo lo anterior significa una sola cosa:  en menos de dos años y faltando más de dos años para el cambio de gobierno, Alejandro García Padilla ha cambiado de rumbo y de agenda.  De una obligación de gobierno serio, racional y centrado en las necesidades objetivas del pueblo, a un enfoque electorero, partidista, por los próximos dos años y pico.  Se trata de un cambio de rumbo y de compromiso:  en vez de servirle al País a lo Ingrid Vila, servirle al partido para volver a ganar.  Y uno se pregunta:  ¿ganar para qué? ¿Para hacer lo mismo el próximo cuatrienio?

Repito una idea cuya realización impediría en el futuro virazones tan dañinas como la que hoy comento:  el gobernador de un sólo término de 6 años, porque la reelección es la madre de esta negación de servicio al pueblo como única justificación del poder que ese pueblo le confiere.  De esa forma el objetivo electorero a mitad de camino no se traga el compromiso de servicio sobre todas las otras consideraciones.

martes, 16 de septiembre de 2014

Política, Democracia, Partidos y Personas


Puerto Rico atraviesa hoy por una crisis total, en las cuatro dimensiones que anoto en el título de estas líneas.

En primer lugar, una crisis política en el sentido de que los nexos, los problemas, y todo el entramado de la vida social gritan desconciertos y disfunciones angustiosas:  crimen, desempleo, insolidaridad a todos los niveles --- a pesar de los esfuerzos de grupos comunitarios de infundir aliento y esperanza al desespero ---, más la pobreza masiva y la incompetencia oficial para entenderla y atenderla.

Esa es nuestra sociedad, nuestra comunidad política, que los griegos llamaban “polis, o “politeia”.

Sobre esa sociedad política, que nos incluye y nos envuelve a todos, se ensaya y se practica la democracia:  la decisión de la mayoría sobre quiénes nos gobiernan, por cuánto tiempo, en qué direcciones de programas de acción.  Es en este momento que entran en juego los intereses, valores, instituciones que aspiran al poder, no para realizar el bien común, sino el suyo particular.  Es ahí que el Todo político se vuelve parte, partido, que secuestra el Bien Común para poner los recursos de todos al servicio de unos pocos.  Llegado al poder, el partido secuestra el Bien Común y lo pone a su servicio, y de ahí en adelante lo envenena todo.  Hay excepciones a esa conducta partidista mezquina:  la generación que fundó la federación norteamericana, la que acompañó a Franklin D. Roosevelt a rescatar a los Estados Unidos de las garras de lo que él llamó “los malefactores de la riqueza”, y más tarde la generación que administró la recuperación de la Europa devastada por Hitler y creadora de las instituciones internacionales que le dieron contenido a la paz tan caramente lograda.

En Puerto Rico la generación creadora y fundadora de tantas cosas de nuestra vida pública le hizo honor a la política, a la democracia, y a un partidismo creador para crear vida y ensanchar la voluntad colectiva.  Pero esa fue la excepción a la generalización de que el partidismo corrompe la democracia y hace aparecer la política como sucia, corrupta e incompetente.

¿Cómo es posible constituir aquella excepción en regla, en supuesto de la vida democrática, con todo y partidos?  La respuesta, como siempre en las cosas humanas, está en las personas.  Compare las personas de 1776 a 1812 en Estados Unidos, y luego la generación de Roosevelt, y la generación de 1938 a 1968 en Puerto Rico con la medianía intelectual y moral que le siguieron, y se dará cuenta de que no hay sustitución para las personas que consideran el servicio público como la base de la felicidad privada:  no en dinero, no en pensiones inmorales, no en escoltas que lo son mucho más, sino en servicio a la humanidad doliente que les confirió el honor de ser figuras públicas.

lunes, 15 de septiembre de 2014

Doral: La Mafia Extorsionista al Descubierto


El gato está fuera del saco.  Los extorsionistas de Doral se han descarado, es decir, se han quitado la careta.

La institución delincuente que ha escrito capítulos épicos en la corrupción bancaria de Puerto Rico, ha vuelto por sus fueros.  Para sobrevivir su incompetencia acude a recursos chantajistas contra el gobierno, además de su conducta rastrera contra personas particulares.  Sé de lo que hablo, pues en 1997 Doral me fabricó una deuda, tipo pagaré, por 80 mil dólares por un préstamo que nunca solicité, ni pagué, ni me fue cobrado.  Falsificó, vía copia fotostática, mi firma y la de mi hija mayor para esos fines ladrones.  El notario que les sirvió de tarugo fue echado de la profesión.  Tuve que amenazarlos con la Corte Federal para que cancelaran el pagaré fatulo, como lo está haciendo hoy contra Hacienda, para dar la impresión de que tiene más capital que el que puede probar.  De ahí la acción desesperada mediante una campaña en Estados Unidos contra el pueblo de Puerto Rico.

Puertorriqueño que insista en utilizar ese banco tramposo y delincuente no sabe mucho de dignidad ni de orgullo patrio.  Ese banco hay que ignorarlo, despreciarlo, castigarlo por su despreciable intento de hacerle daño a Puerto Rico mediante anuncios mandases en los medios más derechistas de los Estados Unidos.

Este asunto lleva 24 horas ante la atención y la opinión pública.  Pero ya es tiempo de que a la indignación del pueblo, el gobierno acuse recibo del insulto y del ataque ruin y cobarde de Doral y sus gatilleros publicitarios del Norte.

Además, se echa de menos, políticamente, la falta de testosterona en el liderato ejecutivo y legislativo del País ante esta afrenta, empezando por el Gobernador.  ¡Ya sabremos mañana si tal ente existe!

martes, 9 de septiembre de 2014

¿No Hay Salida? ¿Tenía Razón Sartre?


Entre la literatura más retante del siglo veinte, se encuentra la que cultivó la angustia.  Soren Kirkegaard, el danés precursor de toda la producción nihilista del siglo, marcó rumbos a Martín Heidegger, Karl Jaspers, y a nuestro Miguel de Unamuno.  Jean Paul Sartre cultivó esa filosofía de la desesperación, y la selló en su drama titulado NO EXIT --- no hay salida. La vida humana es breve, tortuosa, y para más maldad, consciente de su brevedad. Por eso hablaba Unamuno de Sentimiento Trágico de la vida.

El drama humano sellado de finitud se actualiza cada vez que nos encontramos rodeados de improntas aparentemente insolubles.  Así está, colectivamente hablando, este personaje tan querido nuestro --- Puerto Rico , en los albores apenas del siglo 21.  Con tanto que ha progresado y crecido en tantas dimensiones, parece perdido como el personaje de la Divina Comedia de Dante.  “En medio del camino de la vida, turbado me encontré por selva oscura, en que la recta vía era perdida”.  Puerto Rico, 2014.

La clase política, tecnológicamente apta, es gerencialmente incompetente, y lo es por la razón misma de lo que es, escueta y mezquinamente política.  Subordina, contrario a la generación del 40, la felicidad pública a su felicidad privada de ostentación, protagonismo fofo, y gradas contentas, aunque las conduzcan al cadalso.

Las salidas nominales, ostensibles, representan otras tantas maneras de perderse.  El PPD es un partido timorato, oportunista y superficial en su diagnóstico de los problemas y en sus explicaciones al pueblo.  Sin mentir, no dice la verdad.  Tiende y quiere parecerse al otro para sumar unos votos más.  No educa, porque no se atreve.

El otro partido deseduca, se atreve, pero es corrupto hasta la médula, y mendaz hasta las entrañas.

Para mayor tragedia e ironía, la solución --- la salida --- debiera ser generacional.  Pero la nueva generación política, la del PPD, que es la única visible y activa, ha cogido el rumbo de la  irrelevancia.  Con tan cundido de problemas como está esta sociedad --- económicos, sociales, de salud, de educación y de seguridad, ha tomado un rumbo ideológico retórico, de espaldas a esos urgentes problemas.  Porque la soberanía es su curalotodo.  La emoción patriótica nacionalista en el vacío, sin tracción en el carácter político del pueblo ni la idiosincrasia conservadora del Congreso de los Estados Unidos. Esos jóvenes constituyen en el Partido Popular un problema sin programa. Pérdida total. ¿Por dónde es la salida?  ¿Por donde fue en 1940?

lunes, 8 de septiembre de 2014

La Derrota de Javier Echevarría: Una Señal de los Tiempos


Nadie debe escamotearle al licenciado Mark Anthony Bimbela su elección, democrática y en buena lid, a la presidencia del Colegio de Abogados.  Dos factores explican esa elección sobre el que me parecía mejor candidato, por su experiencia académica y administrativa, el licenciado Javier Echevarria.  El primer factor fue la naturaleza de su campaña para el puesto:  activa, persistente, bien financiada, como que tenía un enorme interés en esa honrosa distinción.  Al compararse esa campaña con la de Javier Echevarría, esta última resultó tímida, falta de fuego en la entraña de la ambición.

El segundo factor decisivo fue la percepción de que Echevarría era el candidato del Partido Popular.  No importa que Bimbela fuera favorecido por el establo PNP y por el establito independentista, lo que se proyectó fue lo primero, y eso fue suficiente para convocar otra vez la alianza Penepé-Independentista para enfrentar y derrotar --- en alguna elección, por fin --- al Partido Popular, un hábito ya definitorio del PIP.

Está por verse ahora si la “independencia” personal del nuevo Presidente honra su campaña de independencia partidista, o es hora de pagar deudas con las posturas que a nombre del Colegio se tomen.  Le va mucho al Colegio en esa tesitura.  Estaremos alertas a tales desarrollos.

viernes, 5 de septiembre de 2014

Gran Bretaña y los Estados Unidos: Se Reactiva la Relación Especial


De 1774 a esta parte la Gran Bretaña y los Estados Unidos han mantenido una relación especial --- en la guerra y en la paz, como aliados y como adversarios --- que no tiene paralelo en el mundo moderno.

De 1607 a 1774 esa relación --- colonización, guerra de independencia, alianzas militares de 1914 a 1941 --- ha sido amigable o adversaria, pero siempre especial; ya que las instituciones de la libertad y el gobierno democrático representativo heredado de las trece colonias en adelante arrancó de la Magna Carta de 1200, matriz de todas las libertades anglosajonas.

Desde siempre --- en la guerra y en la paz --- ha privado entre estos dos pueblos lo que vino a llamarse, durante y después de la Segunda Guerra Mundial, “una relación especial” de amistad y coincidencia libertaria.  El momento más dramático y decisivo de esa relación, para salvar del nihilismo hitleriano la Civilización Occidental, ocurrió en medio y a fines de esa Segunda Guerra Mundial, cuando Inglaterra recibió el impacto brutal de la aviación alemana, y el peligro de una invasión aplanadora.  Winston Churchill clamaba por la entrada al conflicto de Roosevelt y los Estados Unidos, pero estos se tomaron su tiempo para entrar en combate.  La traición japonesa de Pearl Harbor forzó la decisión de los Estados Unidos no sólo para su defensa en Oriente, sino para invadir, precisamente desde Inglaterra, al continente que ya Hitler consideraba suyo.  El resto es historia.  Inglaterra resistió y la alianza, bajo el signo de la “relación especial” por la democracia y la libertad escribió la página gloriosa de sacar a Hitler de carrera, y reducirlo a un suicidio cobarde en un sótano pocilga de sus cuarteles.

Hoy, cuando Oriente Medio y la Civilización Occidental se ven otra vez amenazados por la barbarie islámica del Isis, y por las huestes bárbaras de Putin en Ucrania, esa relación especial de las dos democracias más viejas del mundo se reactiva contra el salvajismo Isis y la duplicidad de la nueva versión del stalinismo soviético.

El Primer Ministro Cameron de Inglaterra y el Presidente Obama han dicho presente cogidos de la mano contra la nueva barbarie en Oriente Medio y en el Este de Europa, para liderear, como en tantas otras ocasiones anteriores, la vigencia de la Civilización Occidental.

martes, 2 de septiembre de 2014

La Vieja Guardia y los Jóvenes Turcos en el PPD


La juventud --- madura, que no infantil --- que en el Partido Popular agita la relumbrosa enseña de la soberanía, me despiertan dos recuerdos.  En el mundo de la ficción el primero, el del drama de Henrik Ibsen, Seis Personajes en Busca de Autor.  El segundo, el capítulo político que escribimos en la realidad del PPD en 1964, conocido como el Movimiento de los 22.  Se trataba de un programa de renovación total en las posturas y actividades del PPD, dominado en sus cuadros dirigentes, excepto Muñoz, Fernós y Jorge Font Saldaña, por una generación anquilosada programáticamente.  Cuando Muñoz les retiró el respaldo cayeron como guanábanas maduras.  ¿Frente a qué y quiénes cayeron?  No ante personas, lideres jóvenes y articulados.  Cayeron frente a una explícita formulación programática, empezando por un sistema de primarias garantizadas, un retiro de los ya ancianos legisladores de Cámara y Senado, una vuelta a la justicia social y a un concepto económico de desarrollo integral y no meramente de crecimiento, y una Reforma Universitaria.

Por lo pronto, en 1964, cuatro legisladores jóvenes --- pintados, si no maduros --- llegamos a la Legislatura, tres a la Cámara y este servidor al Senado:  Luis Camacho, Severo Colberg, Pedro Roberto Rodríguez y este servidor, respectivamente.

Esta experiencia podría resultar aleccionadora a los jóvenes que hoy agitan sus ideas ante la alta dirección del PPD.  Excepto que su planteo no es programático, ni arranca de las necesidades del pueblo --- empleo, salud, educación, seguridad, y la competencia y honestidad gubernamental necesarias para responder a ellas. 

En vez de planteos referentes a la democracia del partido, la honestidad del gobierno, la relevancia de las respuestas, esta generación de jóvenes ha optado por las poses ideológicas altisonantes que se resumen en la soberanía.  En vez de enjuiciar el quietismo y la morosidad del PPD en sus posturas programáticas, han optado por las galimatías jurídicas de la quimérica --- en términos electorales democráticos ---  soberanía, que por ser claramente incompatible con la ciudadanía americana, lanzará a esta pilada de juventud --- de otra manera valiosa --- a la irrelevancia y a la frustración.

Los “jóvenes turcos” que en 1923 ayudaron a Kemal Pasha a modernizar y secularizar a Turquía, no andaban con juridicidades, sino con realidades:  modernización, democracia y economía.

Si esta juventud vital e inteligente enfrentara a la vieja guardia con una modernización de sus programas y su desempeño, tendrían futuro.  Con lo otro, ni que lo piensen.  Por eso la vieja guardia del PPD se saldrá con la suya.  Ya tiró al ruedo la ciudadanía americana, como raya en la arena, que los soberanistas no podrán cruzar.

lunes, 1 de septiembre de 2014

Principios del Pensar Político: Ciudadanía y Soberanía


En más de una ocasión escuché de labios de Don Jaime Benítez --- amigo siempre, adversario en algunas ocasiones ---, enfrentado a actuaciones irracionales y bajunas de Carlos Romero,  la expresión lapidaria del demócrata en minoría:  “El error fue perder las elecciones”.  Porque ganar las elecciones, en un contexto democrático competitivo, es la primera obligación y aspiración del político.  Que existan en la vida valores más profundos y fundamentales para la vida humana, ni que decirlo.  Pero las elecciones son término y síntesis de porqué y para qué se combate cívicamente.  El que no le tenga aprecio y respeto a los votos, que se busque otro quehacer que le de sentido a su vida y a su responsabilidad con los demás.

Aspirantes a líderes hay, sin embargo, que en servicio a sus esquemas ideológicos, deprecian las elecciones, que es como despreciar a los electores.  El olimpismo retórico en servicio a ideologías abstractas e integrales les impide calar las circunstancias concretas que facilitan o impiden la realización de las ideas.  Si las cosas --- ya veremos más delante de qué se trata --- no se ajustan a sus olímpicos ideales, pues peor para las cosas.  Con la desventaja, en ese caso, de que las cosas siguen siendo como son, y patean a quienes las ignoran o desprecian como muy poca cosa para mentes sublimes y adelantadas.

Permítame el lector fundar estas observaciones en dos principios en que se anclan estas reflexiones.  Se trata de precisar el punto de partida de todo político, pero especialmente del político democrático, y por tanto del político o aspirante a tal.  Se trata de puntos de partida --- principios, decimos en filosofía --- que al argumentarse y aplicarse conducen a conductas intelectuales y prácticas enfrentadas.  O se parte --- en el primer principio --- de las cosas, de los objetos políticos, instituciones, grupos, intereses, pasiones, ideales operantes, enfrentados en la lucha cívica, e ideas y aspiraciones del animal social que es el hombre, o no se hace política.  Esa es la materia prima del político realista, pragmático, incrementalista hacia ideales y programas plausibles.  Aquí el carácter de la sociedad, su psique colectiva, constituye el punto de partida de toda posibilidad de justicia y progreso.

Por la otra banda anda político o aspirante a tal que  habita en el mundo de las ideas, de los ideales abstractos y absolutos, para medir con ellos la pobre realidad del hombre común y la sociedad compleja.

Aplicación:  los que andan, en el Partido Popular, asegurando los valores operantes del pueblo, aspiran a anclarse en las cosas como son y no como otros quisieran que fueran:  las vulgares cosas políticas y sociales, y culturales, como centro de gravitación política.  Por la otra banda andan los que quisieran que la política fuera otra cosa:  ¿Salvación nacional?  ¿Libertad política absoluta?

Los primeros --- con sus principios de realidad --- andan tratando de asegurarle al pueblo lo que este más aprecia, la ciudadanía americana.  Los otros tienen su visión atada a otra estrella, la salvación absoluta, con o sin pueblo.

El Crimen Político Contra Oscar López


Mi título se queda corto.  Porque el crimen político que aún hoy practican Barack Obama y Eric Holder --- no es sólo contra nuestro patriota Oscar López, es contra la justicia como vínculo solidario de toda sociedad civilizada.  Y es, sobre todo y por principio, un crimen contra la humanidad de todo hombre o mujer.

¿Y quiénes son Barack Obama y Eric Holder?  Son dos prominentes negros norteamericanos a quienes sus compueblanos blancos han honrado con las más altas magistraturas de su País, y que han sufrido en carne propia el escarnio perpetrado contra su raza.  Testigos de excepción, piensa uno, de los macabros crímenes cometidos contra distinguidísimas figuras de su historia reciente.  Tiene uno que asombrarse del hecho de que hoy están lidiando, a través del mundo entero, con los genocidios y violaciones de derechos humanos, desde Palestina a Irak y Siria.

¿Cómo es entonces que no ven, frente a sus propias narices, el crimen que cometen contra Oscar López y su condolida familia?  Estos dos prominentes negros indultan anualmente a docena de criminales de verdad, autores de hechos de sangre contra víctimas inocentes, pero no ven la tortura que realizan contra un ciudadano americano y puertorriqueño que no ha matado ni tan siquiera herido a ningún otro ser humano.  Sólo ha expresado, individualmente y solidariamente con otros, el derecho y la deseabilidad de ver a su patria libre, esté uno de acuerdo o no con sus expresiones o acciones.

Leo en la prensa de hoy que 33 funcionarias de gobierno demostraron ayer, en el Puente Dos Hermanos, su entereza moral por la liberación de Oscar López de la tortura a que lo someten Obama y Holder, mientras se prenden laureles de humanitarios en las lejanías del Oriente Medio, diz que en protesta contra los crímenes de sus terroristas.  La paja en el ojo ajeno, y la viga en el propio.

Cuan propio sería que la Legislatura de Puerto Rico tomara una página del libro de esas 33 mujeres valerosas y las imitaran con una Resolución Conjunta, dirigida al Presidente Obama y al Secretario Holder para que reingresen al género humano y excarcelen a su preso político.  ¿O eso es mucho pedir en nuestra triste ínsula?