Hace 66
años, tras haber Don Luis Muñoz Marín declarado --- y cumplido su compromiso
con el pueblo en el sentido de que un voto por el PPD no era un voto por ningún
status particular, un grupo de populares independentistas crearon el Congreso
Pro Independencia de Puerto Rico.
Muñoz repudió aquella ruptura con el compromiso contraído con el pueblo
y declaró la incompatibilidad del Congreso con el Partido Popular Democrático. Una expresión altiva de Muñoz selló
aquella incompatibilidad. La hizo
personalmente al Presidente de la Cámara de Representantes, el Dr. Francisco
Susoni: “Doctor, si usted quiere
defender la independencia, funde un partido, porque este Partido Popular
Democrático no es independentista”.
Ese fue el sentido de su expresión, no recuerdo si las palabras exactas.
Superado
aquel reto, el PPD logró resonantes victorias hasta 1968. Su derrota entonces no tuvo nada que
ver con el status.
Históricamente
los independentistas se han alineado con lo que entonces surgió --- el Partido
Independentista Puertorriqueño, el hoy moribundo PIP ---, que es hoy una sombra
de lo que fue bajo el liderato de Gilberto Concepción de Gracia. Hoy es un quiste oficinesco en la Comisión
Estatal de Elecciones, sin pueblo y sin impacto alguno en la vida política
puertorriqueña. Lo único que les
interesa es aliarse a los estadistas en la esperanza de derrotar al Estado
Libre Asociado. ¡Vano empeño y
triste destino!
Hoy se
levanta en las filas del Partido Popular un grupo que repite la voluntad
independentista de un sector del PPD.
No confiesan su independentismo abiertamente porque saben que ello sería
un ejercicio de extrema unción, frente al carácter político
anti-independentista de la casi unanimidad del pueblo y electorado
puertorriqueño. Se llaman a si
mismos soberanistas, pero no pueden explicar la diferencia entre soberanía e
independencia. ¿Sabe el lector por
qué? Porque no existe tal
diferencia. Si el lector quiere
confirmar este aserto, consulte cualquier diccionario político, jurídico o ideológico,
a ver si existe alguna diferencia entre soberanía política e independencia política. Son exactamente equivalentes.
Todo lo
anterior indica que los nuevos patriotas que rechazan la autonomía del Estado
Libre Asociado para afirmar su necesidad de soberanía, pero no la
independencia, tienen mucho que explicar, porque su actual discurso carece de
honestidad intelectual, teniendo más bien el carácter de máscara dramática o
pescaíto para coger incautos. Si
explican y dan contenido jurídico diferencial a su novel status --- soberanía
sin independencia --- podríamos asistir a un debate racional, que no es posible
con una independencia encapotada.
La Historia es cíclica: el PPD superará a los "soberanistas" mediante la razón, y el Pueblo machará unido y triunfante hacia el Plebiscito, para el cual la consigna única de Puerto Rico es desenmascarar la estadidad, para que ya difunta esa fantasía demencial, podamos reconstruir el País de la tragedia en la que el PNP lo sumió.
ResponderEliminarLos Boricuas, ni siquiera los que vivimos en varios paises no queremos que nuestra Patria sea un estado pero queremos mantener nuestra ciudadania americana.
ResponderEliminarLo mejor de 2 mundos. Y no hay que expulsar a nadie ys que de eso trsta el Estado LIBRE
ASOCIADO. WE ARE PARTNERS!
Estos son son otros tiempos.
ResponderEliminarEl 1946 pasooooooo!